Se sumerge en un jardín acuático donde cada prenda florece con delicadeza en busca de la luz. Inspirada en la calma suspendida de los estanques florales, la colección evoca un romanticismo botánico, íntimo y etéreo, donde la vegetación silvestre cobra absoluto protagonismo.
Confeccionada en voile de algodón, la propuesta da vida a vestidos fluidos, conjuntos con movimiento y volúmenes suaves que acompañan el cuerpo con naturalidad. Las siluetas se enriquecen con cinturas fruncidas, mangas globo, escotes palabra de honor y estructuras corseteras que exaltan la feminidad con elegancia.







